No es fácil quererme
No es nada fácil, no. Pienso en todas las veces que me has podido necesitar y no he estado. Las veces en que estabas triste y necesitabas un hombro amigo o un abrazo y no he podido dártelo. Aquellas ocasiones en que tenías una alegría y te apetecía compartirla conmigo, pero yo estaba lejos. Cuando no podías más con el curro, tu pareja, tu familia o la vida y querías tomarte unas cervezas y echarte unas risas para olvidarte de todo. Sé que tienes otras personas con las que compartir, pero hay momentos en los que quieres que sea yo y no puede ser. Incluso cuando estoy tienes que conformarte con pedacitos de mí, porque tengo que repartir lo poco que ofrezco. Las llamadas y los mensajes nunca son suficientes, lo sé. Nunca tengo tiempo. Ando siempre liada desempacando cajas, buscando colegio, conociendo la ciudad. Estoy permanentemente cansada. Sabes que a veces te miento y te digo que estoy bien para no preocuparte. Y jue...